sábado, 11 de agosto de 2012

Más intolerancia en Francia...

El proyecto de François Hollande de legalizar los matrimonios homosexuales y el derecho a adoptar de las parejas del mismo sexo no ha gustado a la Iglesia de Francia, que ha decidido complicarle el proceso. El cardenal André Vingt-Trois, presidente de la Conferencia Episcopal del país vecino, ha propuesto que el próximo día 15, durante la celebración de la Asunción de la Virgen, se defienda en todas las parroquias el modelo de familia tradicional.
La idea es que se rece por aquellos que gobiernan, y que esas plegarias ayuden a sensibilizar a los fieles para que sigan las indicaciones de su conciencia, superen cualquier tentación de favorecer a algunos particulares frente al interés común y defiendan que “los jóvenes y los niños dejen de ser objeto de los deseos y conflictos de los adultos y puedan beneficiarse del amor de un padre y de una madre”.
Llama la atención que los pastores católicos entren en la batalla política en un país donde la separación entre Iglesia y Estado ha sido desde hace ya mucho tiempo ejemplar. El caso es que la Iglesia de Francia, referente universal por su laicismo, adopta los modales atrasados que caracterizan a la española y se pone a pegar mordiscos en asuntos que afectan a la ciudadanía y no solo a sus seguidores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario